Por: RedacciónPublicado: 05.12.2011
Fotos: Celia Guerrero
Texto: Juan E. Flores Mateos
Entre el recuerdo al periodista Miguel Ángel Granados Chapa y el reconocimiento a las mujeres que se organizan para cambiar a México la Embajada alemana entregó el V Premio Alemán de Periodismo a los reporteros Marcela Turati Muñoz y José Gil Olmos de Proceso y Thelma Gómez Durán de El Universal.
El certamen, de acuerdo al Presidente del Jurado, Marco Lara Khar, recibió 80 trabajos de los “diversos géneros”, de los cuales “Desaparecidos, una epidemia” y “Unidos por los desaparecidos” de Turati Muñoz; “Cherán mantiene firme su lucha por los bosques” de Gómez Durán y “Nos mataron el miedo” de Gil Olmos resultaron ganadores del primer, segundo y tercer lugar respectivamente.
En su intervención destacó “el trabajo valiente” de los reporteros, no en el sentido machista, sino como la “voz que promueve las acciones por la paz social en México” que fue la temática del concurso.
Además recalcó que los periodistas sólo están enfocados a cubrir la violencia, “como si fuera un partido de futbol o una competencia en donde gana el más listo y audaz y en donde pierde el más torpe y estúpido”.
Para ello recordó la frase del que llamó “artífice” del Periodismo de Paz, Johan Galtung,“la violencia es el humo y el conflicto no resuelto es el fuego”.
En su primera intervención, José Gil Olmos, ganador del tercer lugar enalteció el trabajo de las mujeres en la organización y matizó la magnitud de la “tragedia” que vivimos; “son las mujeres las que andan en esta lucha, se están convirtiendo en un factor de cambio, un factor de paz”.
“Desde la guerra cristera no se había observado una tragedia como la que estamos viviendo”, agregó.
Marcela Turati por su parte, recordó preguntas que se plantea desde el 2008 sobre si el periodismo puede cambiar las cosas, “¿Qué más además de cronicar el horror se puede hacer? ¿Qué nos falta a los periodistas?”
“Tener otra mirada , saber que la gente hace cosas, no sólo contar huérfanos” agregaba mientras el público escuchaba atento. Remarcó que ella siempre busca la forma de “contar la tragedia desde la gente que está tratando de hacer cosas para cambiarlas”.
“¿Cómo hacer para que el más uno valga igual que el cincuenta mil?” fue otra de las preguntas que se hizo mientras relataba su experiencia con las víctimas de la violencia.
Thelma Gómez Durán en su intervención hizo hincapié en que los periodistas “se están volviendo reproductores de un discurso vacío lleno de palabras huecas” por lo que se planteó también, “¿qué periodismo queremos hacer?, ¿el alimentado de políticos o el que volteé a ver ciudadanos?”
Habló sobre su experiencia en Cherán, el valor de las mujeres como iniciadoras del cambio y el significado de su experiencia en esa comunidad:
“Las mujeres fueron las que tomaron la iniciativa las que se organizaron. …una palabra muy bonita que aprendí es una en purépecha, jaripicua, ..que significa ayudarse los unos a los otros”
En su segunda intervención José Gil Olmos reconoció que “los periodistas nos estamos convirtiendo en estenógrafos del poder” y que a los ciudadanos “nos hace falta organización y participación propia”
Además refrendó el compromiso del periodista con la sociedad “Nosotros los periodistas tenemos que provocar que la gente actúe” dijo.
Para finalizar su intervención recordó una frase de Gabriel García Márquez: Una revolución es un cambio, y empieza cuando uno empieza a cambiar también.
En su segunda intervención, Marcela Turati, dijo que le llamaba mucho la atención el silencio, que las víctimas de la violencia sienten incluso que “hablan debajo del mar”.
La reportera dedicó su primer lugar a las organizaciones de las que habla en sus textos ganadores como Fuerzas Unidas por Nuestras Desaparecidas En Coahuila. “Yo considero que este premio no es mío, sino de las mujeres de las organizaciones que relaté, …como FUNDEC”.
“Cuando yo les dije que me habían dado el reconocimiento, se emocionaron mucho y me dijeron; alguien está reconociendo lo que hacemos”.
Thelma Gómez Durán recalcó también el cómo los indígenas, “esas personas que discriminamos los mexicanos” nos están enseñando mucho, como en Cherán.
La premiación cerró con las palabras del embajador alemán, , quién reconoció el trabajo de los periodistas como “sólido en investigación y en ejercicio de la libertad de expresión”.