En Puebla, Guerrero, Michoacán, Oaxaca, Veracruz, DF, Campeche, Nuevo León, Chihuahua, los periodistas salimos esta semana a la calle para pedir que cese la cacería de periodistas en Veracruz, exigir justicia y gritar: ¡Losqueremosvivos, Nosqueremosvivos! Aquí algunas crónicas y mensajes mandados desde los frentes de lucha. Si quieres colaborar con la tuya escribe a [email protected]
Por: RedacciónPublicado: 09.05.2012
[email protected]: Acabo de estar junto a reporteros, fotógrafos y amigos solidarios de ContingenteMx en el acto de protesta y duelo por los compañeros asesinados en Veracruz.
Me da gusto ver que hay gente que se mueve, que sale de su casa para manifestar el luto en forma pública, que no es la butaca del cine desde donde tuitea #losqueremosvivos, #nosqueremosvivos.
Son muy pocos respecto del universo de informadores en Puebla, sí. Son insuficientes cinco o seis voces para un discurso en un contexto cerradísimo, insolidario y frío como el de Puebla, sí. Es casi nada una hora de acto, seguro que sí. Pero salieron, se movieron, se juntaron. Y eso es algo. ¡Algo!, en este sitio donde la indiferencia siempre gana todas las batallas. Buena noche a [email protected] Que haya prosperidad en los frentes de lucha de cada [email protected] Un abrazo fuerte, Dulce Liz
Los queremos vivos
“No se mata la verdad asesinando a periodistas” reclamaron hoy, 4 de mayo, una treintena de comunicadores y reporteros gráficos de Puebla al presidente de México Felipe Calderón Hinojosa, durante su visita a ese estado por los festejos de los 150 años de la batalla del 5 de Mayo.
Un tuit que pide #losqueremosvivos convocó a los comunicadores para sumarse a las protestas programadas en otras ciudades del país por los crímenes cometidos contra periodistas en Veracruz. Cinco en los últimos siete días.
Calderón aguardó adentro de la catedral poblana para escuchar un musical que celebra la victoria del batallón mexicano frente a los franceses hace 150 años, mientras una decena de elementos de seguridad vigilaban a los reporteros.
Afuera, en la plancha del zócalo de la ciudad, llegaron los periodistas y encendieron veladoras sobre un moño negro para mostrar el luto por el asesinato de los colegas del estado vecino y del resto del país.
Los fotorreporteros depositaron sus cámaras frente a las velas, guardaron silencio y luego las tomaron para consignar la protesta.
“Nosotros no tenemos nada que festejar. Venimos a llorar juntos el dolor por nuestros colegas muertos”, sentenció la periodista Dulce Liz Moreno.
También exigimos justicia, valor para castigar a los responsables de los asesinatos cometidos en Veracruz y en el resto del país porque “hoy en México matar periodistas sale muy barato”, lamentó Arturo Alfaro, reportero de la Jornada de Oriente.
“Hoy son los periodistas de Veracruz, pero han sido los de Tamaulipas, Sinaloa, Chihuahua y los del resto del país quienes nos ocupan hoy en nuestra protesta”, agregaron los comunicadores.
El 3 de mayo, cuando se conmemora el Día Mundial de la Libertad de Prensa, fueron hallados sin vida cuatro trabajadores de medios de comunicación en Veracruz; tres de ellos reporteros gráficos y una ex empleada del área comercial de un diario.
Gabriel Huge, Esteban Rodríguez y Guillermo Luna trabajaron como fotoperiodistas en los medios locales Notiver y Veracruznews. Irasema Becerra, fue empleada en actividades administrativas del periódico local El Dictamen.
Los cuerpos desmembrados de Gabriel, Esteban, Guillermo e Irasema fueron arrojados a un canal de aguas negras en bolsas de plástico, confirmó la Fiscalía de Veracruz.
Los fotoperiodistas habían salido atemorizados de Veracruz meses atrás porque fueron amenazados, afirmó la organización de Derechos Humanos en Veracruz “Artículo 19”.
Notiver es el medio en el estado de Veracruz que suma el mayor número de víctimas. El 20 de junio del año pasado, Miguel Ángel López Velasco, reportero y columnista de dicho medio fue asesinado con un arma de calibre nueve milímetros.
La esposa de Miguel Ángel y su hijo Ismael López, quién trabajó como fotógrafo, también en Notiver, fueron ultimados en el mismo ataque.
El 26 de julio del mismo año, la reportera de la fuente policial en Notiver Yolanda Ordaz, fue asesinada y su cuerpo fue encontrado en un lote cercano al periódico Imagen.
La organización Amnistía Internacional mantiene un registro de 75 periodistas asesinados en un plazo de 11 años (2000-2011) que no contabiliza los de este mismo año. (POR Magaly Herrera/Puebla)
En Xalapa: “No se mata la verdad matando periodistas”
El luto periodístico y la indignación de la sociedad civil continúa. Una enorme manta en letras negras no podría ser más elocuente: “No se mata la verdad matando periodistas”.
Sus autores, la Compañía Titular de Teatro y estudiantes de la Facultad de Teatro de la Universidad Veracruzana protestaron enérgicamente en las afueras de Palacio de Gobierno.
“No más muertes a periodistas” y “Ni uno más”, eran las consignas gritadas por alrededor de 20 personas.
La portación de un cartón ampliado del caricaturista de Milenio, Patricio, era más elocuente: “Exigimos el esclarecimiento del cobarde asesinato de Regina Martínez, no a los chivos expiatorios”.
Es el desfile del 126 aniversario del día del trabajo, los actores, activistas sociales y universitarios alzaron la voz de forma enérgica; enfrente, sepulcral silencio y caras adustas.
Al principio de la protesta, el subsecretario de Gobierno, Tomás Carrillo, el secretario de Gobierno, Gerardo Buganza, alcaldesa de Xalapa, Elizabeth Morales y el secretario del Trabajo y Previsión Social, Marco Antonio Aguilar Yunes aplaudieron de forma tímida, apenas cinco golpeteos en las palmas de la mano.
Cuando fueron increpados, enfrente de los reporteros, el gesto sonriente se les descompuso, tragaron saliva y estoicos, serios, tuvieron que “aguantar vara”.
“Nosotros venimos a pedir un esclarecimiento del caso y no queremos chivos expiatorios, lo que nosotros venimos a pedir aquí es justicia”, dijo uno de los manifestantes.
Los gritos de “no les creemos” también se escucharon en las afueras del Palacio de Gobierno, a escasos dos metros del presídium, el mismo al que el Gobernador de Veracruz no se quiso quedar para evitar las protestas por el asesinato de Regina Martínez ocurrido el pasado sábado por la tarde.
El Ejecutivo del Estado prefirió desayunar en privado en el patio central del Palacio de Gobierno a las 7:30 de la mañana. Ocho treinta abrió el desfile con los líderes de los sectores obreros, todos ellos agremiados y simpatizantes del PRI. Nueve treinta habría dejado “encargado el changarro” al secretario de Gobierno, Gerardo Buganza y al “compadre”, el secretario del Trabajo, Marco Antonio Aguilar, ellos tuvieron que aguantarse la protesta por el crimen de la corresponsal de Proceso en Veracruz, mismo que ya dio la vuelta al mundo.
“No queremos ningún periodista más muerto en esta entidad, no queremos ver más sangre, queremos justicia. Esto es lo que venimos a pelear”.
Un moño negro al inicio de la protesta fue la antesala de la inconformidad, con dos mantas y varias cartulinas los activistas indignados exigiendo justicia, todos ellos ataviados en playeras blancas en símbolo de paz y en pantalones negros en señal de luto.
Marco Antonio Aguilar y Tomás Carrillo sonreían de forma nerviosa, Gerardo Buganza serio, con el rostro enrojecido, con la mirada fija en la Catedral de Xalapa, como pidiendo misericordia para los servidores públicos.
Elizabeth Morales con el rostro adusto, apretándose los labios, la mirada extraviada, los secretarios de Desarrollo Social y de Protección Civil, Marcelo Montiel y Nohemí Guzmán, se hicieron los desentendidos.
Fueron los cinco minutos más eternos del desfile para los integrantes del presídium, un empleado de la Dirección de Política Regional, con el chaleco de Gobierno Prospero en color rojo, salió al quite de “los patrones” jalando la manta de “No se mata la verdad matando periodistas” y con aires de prepotencia intentó que la manifestación siguiera su camino para dejar de incomodar a los servidores públicos, pero fue corrido a gritos.
“No nos van a ganar, no más acosos del gobierno. Justicia pronta para Regina Martínez”, repelaron los manifestantes. (Noé Zavaleta)
En Coatza y Mina
El gremio periodístico del sur de Veracruz exigió justicia para Regina Martínez, corresponsal de Proceso en la entidad y asesinada el pasado sábado 28 de abril.
Una veintena de reporteros partió del Parque Hidalgo hacia el Palacio Municipal del municipio de Minatitlán, ayuntamiento ubicado a 383 kilómetros de la capital del estado.
Con megáfono en mano, los integrantes de radiodifusoras, periódicos, portales digitales y semanarios regionales exigieron “ni una muerte más” en el gremio.
La protesta pacifica ocurrió una hora antes de que trascendiera el hallazgo de los cuerpos sin vida y embolsados de Gabriel Huge Córdoba, Guillermo Luna Varela y Esteban Rodríguez, reporteros gráficos de la zona conurbada Veracruz-Boca del Río.
En las escalinatas del Palacio Municipal de Minatitlán los comunicadores encendieron poco más de una decena de velas y exigieron a la Procuraduría General de Justicia del Estado y a la Procuraduría General de la República el pronto esclarecimiento del asesinato de la periodista de Proceso.
A través del megáfono los reporteros pidieron garantías a las autoridades de seguridad pública y de justicia para el ejercicio libre y sin zozobras de la actividad periodística.
A los ciudadanos que volteaban a verlos extrañados, les recordaban que en la actual administración estatal cinco reporteros han sido privados de la vida y dos más se encuentran en calidad de desaparecidos, sin contar los 4 asesinados de este jueves en Boca del Río.
Los manifestantes recordaron que en la zona sur de Veracruz, en marzo del 2011, secuestraron al reportero de Jaltipán, Noel López Olguín, quien cuatro meses después fue hallado sin vida en una fosa.
La marcha de los periodistas del sur de Veracruz concluyó en el Parque Independencia en donde pegaron sus cartulinas con consignas, exigiendo justicia para la corresponsal de Proceso y garantías para el ejercicio de la profesión. (Noé Zavaleta)
Periodistas de Campeche, Guerrero y Oaxaca se suman
Periodistas de Campeche, Guerrero y Oaxaca, así como organizaciones civiles internacionales y nacionales se sumaron a la condena por el asesinato de la periodista Regina Martínez, corresponsal de la revista Proceso en Veracruz.
En Campeche, al conmemorarse el Día Mundial de la Libertad de Prensa, el gremio periodístico de esa entidad protestó por la ola de asesinatos de periodistas cometidos en el estado de Veracruz, incluidos el de Regina Martínez, corresponsal de Proceso, y el de dos fotógrafos y un exreportero gráfico que aparecieron cercenados este jueves.
Hoy, antes de iniciar sus labores, reporteros, fotógrafos y camarógrafos de los diferentes medios se manifestaron en un mitin en el zócalo de esta capital, donde repudiaron estos crímenes contra comunicadores, que hoy sumaron tres nuevas víctimas en Veracruz, y exigir al gobierno un alto a la impunidad y garantías plenas para el ejercicio informativo.
“No caben los festejos de un Día Mundial de la Libertad de Prensa, mientras quienes ejercemos el periodismo continuemos bajo este panorama incierto y de peligro”, expuso el periodista Luis Armando Mendoza durante la protesta a la que discretamente se sumaron algunos actores políticos como Layda Sansores.
“Es el momento de que el gremio periodístico nacional se sume en una cruzada para exigir al gobierno el esclarecimiento de los casos de periodistas victimados, además de garantías para el ejercicio del periodismo”, convocó.
En el mismo sentido, casi un centenar de comunicadores y representantes de organizaciones de derechos humanos de Oaxaca realizaron una marcha silenciosa con veladoras y moños negros en señal de duelo por el asesinato de Regina.
Con pancartas exigían justicia no sólo para Regina, sino para los 76 crímenes contra periodistas que continúan en la impunidad.
Luego de realizar una marcha del templo de Santo Domingo al Zócalo de esta ciudad, reporteros, fotógrafos y camarógrafos colocaron sus grabadoras, libretas, cámaras en el suelo junto a una cruz de veladoras para manifestar su inconformidad con las autoridades gubernamentales que no garantizan el ejercicio periodístico en el país.
Con pancartas donde se resaltaban consignas como: “La voz de Regina Martínez, es un grito que no morirá”, “Sin derecho a la información y sin derecho a la libre expresión, somos una sociedad sometida”, “Libreta, pluma y grabadora, mis únicas armas. Que se haga justicia”, “¡Alto a la impunidad ¡”, los comunicadores se sumaron a la condena nacional e internacional por el asesinato de la periodista Regina Martínez.
Los representantes de los diferentes medios de comunicación de Oaxaca portaban cubre bocas con la consigna “No nos callarán”; y pancartas con leyendas como “Exigimos que el derecho a informar y ser [email protected] se garantice”, “¡Repudiamos los asesinatos de periodistas!” y “No +Crímenes contra comunicadores. No +impunidad”.
En la protesta se hizo notar que en el Día Mundial de la Libertad de Prensa instituido por la Organización de las Naciones Unidas no hay nada que festejar.
Mientras tanto, en Chilpancingo, la capital de Guerrero, un centenar de reporteros marcharon por la mañana para exigir el esclarecimiento del asesinato de la corresponsal de Proceso, y conmemorar el Día internacional de la Libertad de Prensa.
Lamentaron que el ambiente de hostilidad contra el gremio haya rebasado a las autoridades de los tres niveles de gobierno y la impunidad sea la constante en todas las agresiones y asesinatos contra periodistas.
Demandaron al gobierno federal que el asesinato de Regina no quede impune, como ha sucedido con el caso de los 13 trabajadores de los medios de comunicación que han sido asesinados en Guerrero.
Cerca de las 11:00 horas, portando pancartas el contingente de reporteros partió en marcha de la plaza Libertad de Expresión, ubicada en el centro de esta capital y se dirigieron a la sede del Poder Ejecutivo, al sur de la ciudad, donde realizaron un mitin para demandar garantías y poder ejercer el periodismo sin ningún tipo de amenazas y agresiones.
Durante el trayecto, los reporteros se detuvieron frente a la sede del Congreso local y la Procuraduría General de la República (PGR), para exigir que se legislen medidas de protección para el gremio periodístico y que se esclarezcan los crímenes contra periodistas que se han registrado en el país.
8 MINUTOS DE SILENCIO DESDE JUAREZ
Los periodistas de Ciudad Juárez conocen, de primera mano, lo que significa apuntar una cámara o escribir en una libreta para colectar información mientras son amenazados con armas de grueso calibre.
Al menos en dos ocasiones, desde el 2008 a la fecha, compañeros cayeron abatidos por balas criminales e intolerantes que buscar callar a la sociedad. Armando Rodríguez y Luis Carlos Santiago son quienes pagaron con su vida haberse dedicado de forma íntegra a la profesión.
Sus homicidios cambiaron, en definitiva, las formas de hacer periodismo en esta frontera, pero no lograron coartar la labor informativa que es base en una sociedad que trata de vivir en democracia.
Los reporteros de Ciudad Juárez lanzan un grito desde este rincón de México a sus colegas de Veracruz y de todos lados: No se rindan.
El viernes 5, el grupo de reporteros de la conocida como fuente policiaca decidieron sumarse a la exigencia nacional de un alto a las agresiones y una recta aplicación de la justicia, en un acto celebrado en el monumento al Papelerito, ubicado en la Plaza del Periodista.
Aquí, los informadores portaron cartulinas con insignias tales como “No Más Agresiones a Periodistas”, “La Impunidad Mata” y “Exigimos Justicia”.
Luego, como parte de la protesta silenciosa, los manifestantes colocaron sus libretas, plumas, grabadoras, teléfonos y cámaras, frente al monumento al Papelerito, que representa la libertad de expresión.
Juntos, guardaron ocho minutos de silencio, uno por cada uno de los colegas asesinados en Veracruz. Después, exigieron aquí un cese a la impunidad, ya que los asesinatos de 17 periodistas en Chihuahua continúan sin ser esclarecidos por la falta de una investigación real.
En este estado fronterizo 17 periodistas han sido privados de la vida en diferentes hechos violentos del 2000 a la fecha, según el registro que lleva la Red de Periodistas de Juárez y que hace público a través de su página de internet (www.reddeperiodistasdejuarez.org).
Esta agrupación expone que preguntar y tomar datos e imágenes con el único fin de informar, es cada vez más castigado para los periodistas en México, donde informar con veracidad cuesta hasta la vida.
También menciona en su portal de internet que las agresiones contra periodistas por parte de los elementos de las diferentes corporaciones policiacas no han cesado, incluso se han documentado 18 casos en los que fotógrafos han sido arrestados, golpeados, amenazados u obligados a borrar su material gráfico.
“En ese contexto reiteramos la exigencia de justicia para los periodistas asesinados, diligencia en la investigación y judicialización de las denuncias presentadas por compañeros que han sido víctimas de agresiones y detenciones injustificadas, así como respeto irrestricto a la libertad de expresión y derechos humanos”, refiere la RPJ.
(Por Lucy Sosa desde Juárez)
Ya Basta desde México DF
Con el grito de “¡No debieron morir!” decenas de periodistas, articulistas, editores y fotógrafos de diversos medios, así como defensores de derechos humanos y ciudadanos, exigieron este sábado 5 de mayo, al pie del Ángel de la Independencia detener el embate que ha habido en contra de más de 100 reporteros en todo el país en la última década, la mayoría en lo que va del gobierno de Felipe Calderón.
En la glorieta del símbolo de la independencia se citaron los trabajadores de los medios de comunicación como parte de las protestas que se han realizado la última semana, tras la muerte de la corresponsal de la revista Proceso en Jalapa, Regina Martínez, quien fue encontrada en su domicilio muerta, con huellas de tortura y de asfixia.
La protesta silenciosa de los representantes de distintos medios fue también por el asesinato de los tres reporteros veracruzanos Gabriel Huge, Guillermo Luna y Esteban Rodríguez, cuyos cuerpos desmembrados fueron encontrados el pasado jueves en Boca del Río, junto con el de una mujer pareja de uno de los periodistas porteños.
La ola de violencia contra los periodistas mexicanos ha sido denunciada internacionalmente por distintas agrupaciones como la ONU, Amnistía Internacional, Reporteros sin Fronteras, Articulo 19, Comité de Protección para Periodistas (CPJ por sus siglas en inglés), entre otros, que califican a México como uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo.
A pesar de esta denuncia internacional la cuota de muertes violentas entre los reporteros mexicanos sigue. La organización Reporteros sin Fronteras tiene acreditados 80 periodistas asesinados en los últimos 11 años y 14 desaparecidos. CPJ señala que en el gobierno de Felipe Calderón fueron asesinados 32, en tanto que Articulo 19 acredita que sólo en 2011 hubo 172 casos de amenazas y agresiones a reporteros en México.
Ayer en la noche, cientos de velas iluminaron la imagen de muchos de estos periodistas asesinados cuyos nombres fueron mencionados por la reportera Jesusa Cervantes en un homenaje bajo el coro al unísono de “¡No debieron morir!” que lanzaron los fotógrafos, camarógrafos, reporteros y ciudadanos ´que acudieron al monumento de la capital mexicana exigiendo justicia.
Antes, tras un minuto de silencio, el reportero Álvaro Delgado leyó un comunicado titulado “¡Basta ya de impunidad!” dirigido a Felipe Calderón, a la titular de la PGR, Marisela Morales, al gobernador de Veracruz, Javier Duarte, y al procurador de esa entidad, Felipe Amadeo Flores, denunciando que el asesinato de la corresponsal de Proceso, Regina Martínez, no es un caso aislado sino parte de una serie de muertes violentas en los últimos dos años en Veracruz, sin tomar en cuenta las últimas tres de este fin de semana.
Con un altavoz prestado por las organizaciones sociales, se leyó este comunicado entregado desde hace varios días al gobierno federal y veracruzano, en el que se denuncia que las muertes de los reporteros de esa entidad es también parte de la peor época para el periodismo mexicano, con las decenas de asesinatos y desapariciones.
“De nada han valido los compromisos de palabra ni la creación de fiscalías y leyes para la protección de los periodistas: México se ha convertido en uno de los países más peligrosos para los informadores”, exclamó el reportero ante los gritos de “Ni un muerto más!” lanzado en medio de una llovizna que no desalentó a los periodistas y ciudadanos reunidos alrededor de las velas que se mantuvieron encendidas, alumbrando las fotografías de los compañeros finados.
Posteriormente la periodista Carmen Aristegui leyó otro comunicado emitido por reporteros de Veracruz en el que manifiestan que “es una afrenta intolerable”, lo que está ocurriendo en esa entidad com los asesinatos a Regina Martínez, el pasado 28 de abril, y los tres reporteros gr Gabriel Huge, Guillermo Luna y Esteban Rodríguez, el pasado jueves.
En el acto luctuoso en el que se colocó una corona de flores con la leyenda “Gobierno mataperiodistas” y decenas de velas a sus pies, se informó que se mantendrán las manifestaciones de protesta y de exigencia a que se investiguen los asesinatos de todos los periodistas en el país, sobre todo los últimos en Veracruz.
Entre estas actividades se planteó una manifestación en la residencia presidencial de Los Pinos, para exigir detener la violencia generada por la guerra contra el crimen organizado que ha cobrado la vida de miles de ciudadanos, entre ellos más de 100 periodistas.
Por más de una hora los periodistas se mantuvieron en la glorieta de la avenida Reforma, a la que en muchas ocasiones han acudido a cubrir manifestaciones de protesta por agrupaciones ciudadanas, sindicales, campesinas, indígenas, y que ahora acudieron también pero como víctimas de esta violencia demandando justicia.
Uno de los carteles que portaban en sus manos era más que elocuente: “No se mata la verdad matando a periodistas”.
(Por José Gil Olmos, DF)
DESDE MONTERREY: NI UNO MAS
Nosotros nos manifestamos en la explanada de los héroes de Monterrey a las 13:00 hrs., mi cartel decía “Por Regia Martínez y todos los periodistas, Ni 1 más”. Estuvimos 6 personas y más de 10 periodistas principalmente de agencias internacionales. Soy defensor de Derechos Humanos y familiar de dos personas desaparecidas de manera forzada en Coahuila.
La manifestación realizada en Monterrey tras los cobardes asesinatos de periodistas en Veracruz que se suman a todos los ocurridos en el país es una acción en solidaridad con los periodistas de a pie, de esos periodistas que han dado su vida por encontrar y mostrar la verdad.
Me solidarizo con ellas y ellos porque me identifico en su búsqueda de la verdad y la justicia, porque me han demostrado su apoyo en la búsqueda de nuestros desaparecidos.
Hoy más que nunca es momento de sumar esfuerzos para no ser vencidos por este sistema de muerte que nos gobierna. Hay que seguir luchando por la memoria de esas y esos que nos han arrebataron cobardemente. Saludos (Por Jorge Verástegui, Monterrey)
(Corresponsales de Proceso/Publicado en la agencia APRO)