México y el Mediterráneo, diálogo entre fronteras

Hacia una cobertura sensible y responsable de la migración.

Desde las costas de Libia hasta las cuencas del Río Bravo se vuelve cada día más complicado cruzar las fronteras. Los gobiernos de la Unión Europea y los Estados Unidos intensifican las medidas para evitar la entrada de migrantes, refugiadas y refugiados en su territorio.

El Mar Mediterráneo se ha convertido en una fosa común, y en las ciudades fronterizas de México miles de migrantes y refugiados están suspendidos sin alguna esperanza de pasar al otro lado.

¿Qué significa esta dinámica para el periodismo? ¿Cómo narramos de una manera sensible y responsable a las personas que huyeron del hambre, la violencia o la persecución? Rocío Gallegos (Ciudad Juárez), Ángeles Mariscal (Chiapas) y Wolf-Dieter Vogel (Oaxaca/Berlín) conversaron sobre estos desafíos.

En el conversatorio se mostró que en la detención del flujo migratorio hay muchos paralelismos a nivel global: la externalización de las fronteras, la militarización, la influencia de la UE y los EEUU en las políticas migratorias de los países de tránsito u origen. 

Como periodistas debemos considerar estos paralelismos y sobre todo las estructuras globales que obligan a tanta gente dejar su lugar de origen, ver las causas y no solamente las consecuencias. Además, debemos preguntarnos ¿Quiénes se benefician de los migrantes?

Pero no ayuda mucho hablar abstractamente sobre „la violencia“ o „la pobreza“. Tenemos que enfocar las historias personales de cada migrante o refugiado. Cada una tiene sus razones propias para migrar o huir. Ellos deben ser las y los protagonistas. Eso también implica ser cuidadoso en nuestras narrativas, sobre todo en el lenguaje en que nos expresamos.

Sin duda no son las autoridades, sino los mismos migrantes y refugiados y las organizaciones de la sociedad civil que defienden los derechos humanos de las personas en el camino. Si queremos apoyar en este proceso con nuestras publicaciones, tenemos que destacar estas actividades, juntar nuestras experiencias y elaborar estrategias conjuntas. 

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