ZonaDocs, integrante de la Alianza de Medios de nuestra Red de Periodistas de a Pie, ha elaborado una serie de recomendaciones básicas para periodistas y audiencia, sobre la incorporación del lenguaje incluyente como una estrategia comunicacional contra la discriminación.
El rechazo del lenguaje incluyente y la desinformación
Se ha suscrito sobre diversas noticias que lo único que buscan es promover posturas de odio, discriminación, exclusión, invisibilización y la vulneración de los derechos humanos de un grupo importante dentro de la sociedad.
De manera engañosa se asegura que la Real Academia Española es la única “autoridad lingüística” que puede dictar las normas del lenguaje. Incluso se han abierto foros de discusión para fomentar su rechazo, con un tono principalmente polémico, dentro de los medios de comunicación.
En estos se habla de manera peyorativa de las formas del lenguaje incluyente y se intenta justificar con la norma lingüística. Cualquier tipo de comunicación, ya sea oral o escrita –o también de comportamiento–, que ataca o utiliza un lenguaje despreciativo o discriminatorio con referencia a una persona o grupo en función de lo que son; basándose en su religión, etnia, nacionalidad, raza, color, ascendencia, género u otras formas de identidad.
Lenguaje Incluyente
«Lo que se está marcando ahí es un hecho social desde una resistencia lingüística, los lingüistas no podemos interferir con nuestros sujetos de estudio. No es que esté mal o esté bien: está sucediendo». Yasnaya Aguilar, lingüista, escritora, traductora, activista de derechos lingüísticos e investigadora mexicana.
No se trata de reemplazar una letra por otra, o de usar x o @; sino de reconocer que detrás del lenguaje incluyente, lo verdaderamente importante es la identidad de una persona.
Este es un tema de DERECHOS
Desde el 2015, en México es posible acceder al reconocimiento de la identidad de género, permitiendo a las personas ser numeradas e identificadas por lo que son, sienten, viven y deciden.
En México existe la Ley de Identidad de Género, la cual consiste en una serie de disposiciones que reconocen legalmente a las personas trans en relación con su identidad autopercibida.
La lengua se construye con el poder que las personas tenemos para crear. Sirve de instrumento para nombrar el mundo que nos rodea y, al mismo tiempo, nos impide comunicarlo sin el código de la palabra.
El lenguaje incluyente busca revertir todas aquellas formas que invisibilizan, cuestionan la existencia, discriminan y pretenden promover el odio, para dar cabida a otras identidades no binarias y de género.
La identidad de género de una persona no es un tema de debate, sino un asunto de derechos que no es negociable.
La desinformación que se genera con estos discursos violenta los derechos de las personas trans y no binaries. Cuando apostamos por un lenguaje incluyente, también lo hacemos por un lenguaje no sexista.
ZonaDocs realizó una serie de videos cortos para TikTok, para explorar estas posturas y discursos que, sí, en su mayoría están construidos con desinformación, información errónea, engañosa y falsa.